Tips para el colon irritable

Por lo general las personas suelen desarrollar sus propias maneras de vivir con el enemigo. La clave: ¡No te desanimes!

Los cambios en la dieta y las tácticas para aliviar el estrés deben proporcionar una dosis significativa de alivio. Para garantizar el éxito, combínalos con una de las terapias alternativas que se indican a continuación. 

1. No te pases con los intestinos

- Minimiza los alimentos fritos, las carnes, los aceites, la margarina, los productos lácteos y otros alimentos grasos. Estos tipos de comidas hacen que tu colon se contraiga violentamente, lo cual puede causar diarrea y dolor abdominal.

- Aléjate de las comidas picantes. La capsaicina en los pimientos picantes, por ejemplo, hace que el intestino grueso entre en espasmos, lo cual puede causar diarrea.

- Reduce la cafeína. Puede empeorar el SII al irritar tus intestinos.

- Evita los alimentos que se sabe que causan flatulencia, incluyendo el repollo, las coles de Bruselas y el brócoli.

- No mastiques chicles ni dulces que contengan edulcorantes artificiales. Entre los edulcorantes comunes en estos productos se encuentran el sorbitol y el manitol, que pueden tener un efecto laxante y son muy difíciles de digerir.
Cuando las bacterias en tu colon eventualmente descompongan estos "azúcares no absorbidos", tendrás gases y diarrea.

- Deja de fumar. La nicotina contribuye a las crisis de SII. Además, cuando fumas, a veces puedes tragar aire, y las personas con SII son muy sensibles a tener aire en sus intestinos.

2. Ingiere más fibra

La fibra soluble absorbe el líquido en tus intestinos, ayudando a prevenir la diarrea. Las buenas fuentes son los frijoles, la avena y algunas frutas, tales como manzanas, fresas y toronjas.

Si parece que no puedes obtener suficiente fibra soluble en tu dieta, toma un suplemento diario de psyllium, el ingrediente principal de los suplementos de fibra dietética.

A diferencia de los laxantes químicos, el psyllium es seguro para tomar a largo plazo. Sigue las instrucciones de la etiqueta para la dosificación.

Si por el contrario el estreñimiento es tu queja principal, ingiere fibra insoluble, que se encuentra en el trigo entero, salvado, otros granos enteros, ensaladas verdes y otros alimentos. 

La fibra insoluble abulta las heces, lo cual acelera su paso a través de los intestinos.

Si no has consumido mucha fibra en tu dieta, aumenta la cantidad que comes gradualmente. Añadir demasiada fibra de una sola vez puede producir gases e hinchazón. 

Comienza con 8 g de fibra al día (más o menos lo que encontrarías en dos peras) y aumenta en 3 ó 4 g al día hasta alcanzar los 30 g al día.

Bebe por lo menos de seis a ocho vasos de agua cada día para mantener la fibra en movimiento sin problemas a través de tu sistema digestivo.

3. A la hora de tus comidas, ve con calma

Come comidas más pequeñas con más frecuencia en lugar de un par de comidas grandes cada día. 

Ingerir demasiada comida de una vez puede sobreestimular tu sistema digestivo.

Si por lo general no comes bien, ve más despacio y presta más atención a masticar la comida.

Las personas que comen demasiado rápido, a menudo tragan demasiado aire, lo cual se convierte en gases intestinales molestos.

Ha sido todo por hoy, gracias por tu visita y espero que te haya gustado.

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